Journal Information
Vol. 57. Issue 10.
Pages 637-647 (October 2021)
Visits
5722
Vol. 57. Issue 10.
Pages 637-647 (October 2021)
Artículo Especial
Full text access
Resultados de salud: hacia la acreditación de los servicios de neumología
Health Outcomes: Towards the Accreditation of Respiratory Medicine Departments
Visits
5722
José Manuel Álvarez-Dobañoa, Gerardo Atienzab, Carlos Zamarrónc, María Elena Toubesc, Lucía Ferreiroa,
Corresponding author
lferfer7@gmail.com

Autor para correspondencia.
, Vanessa Riveiroc, Ana Casalc, Juan Suárez-Anteloc, Nuria Rodríguez-Núñezc, Adriana Lama-Lópezc, Carlos Rábade-Castedoc, Carlota Rodríguez-Garcíac, Tamara Lourido-Cebreiroc, Jorge Ricoyc, Romina Abelleirac, Antonio Golpea, Beatriz Paisb, Francisco Javier González-Barcalaa, Luis Valdésa
a Servicio de Neumología, Complejo Hospitalario Clínico-Universitario de Santiago, Grupo Interdisciplinar de Investigación en Neumología, Instituto de Investigaciones Sanitarias de Santiago (IDIS), Santiago de Compostela, España
b Unidad de Calidad y Seguridad del Paciente, Subdirección de Calidad, Área Sanitaria de Santiago de Compostela y Barbanza, Santiago de Compostela, España
c Servicio de Neumología, Complejo Hospitalario Clínico-Universitario de Santiago, Santiago de Compostela, España
This item has received
Article information
Abstract
Full Text
Bibliography
Download PDF
Statistics
Figures (5)
Show moreShow less
Tables (1)
Tabla 1. Propuesta de indicadores de calidad de un servicio de Neumología
Resumen

Los sistemas nacionales de salud deben garantizar a los ciudadanos el cumplimiento de unas condiciones básicas como la equidad, la eficiencia, la calidad y la transparencia. En aras del derecho que tiene la sociedad a conocer los resultados de salud de su área sanitaria, el objetivo de este artículo es elaborar una propuesta de acreditación de los servicios de neumología desde el punto de vista asistencial, docente e investigador, midiendo sus resultados de salud a través de indicadores de calidad en la atención. Para mejorar estos, deberíamos utilizar unas herramientas de gestión (que se desarrollan en el artículo) y que, sin duda, nos ayudarían a conseguir los objetivos propuestos. La mejora del nivel de acreditación puede servir como estímulo para perfeccionar la gestión clínica y para que los profesionales ejerzan una capacidad de dirección cada vez mayor y adopten medidas para reforzar los resultados en la atención a sus pacientes.

Palabras clave:
Gestión clínica
Resultados de salud
Indicadores
Acreditación
Neumología
Abreviaturas:
EPID
EPOC
SEPAR
TEP
Abstract

National health systems must ensure compliance with conditions such as equity, efficiency, quality, and transparency. Since it is the right of society to know the health outcomes of its healthcare system, our aim was to develop a proposal for the accreditation of respiratory medicine departments in terms of care, teaching, and research, measuring health outcomes using quality of care indicators. The management tools proposed in this article should be implemented to improve outcomes and help us achieve our objectives. Promoting accreditation can serve as a stimulus to improve clinical management and enable professionals to take on greater leadership roles and take action to improve outcomes in patient care.

Keywords:
Clinical management
Health outcomes
Indicators
Accreditation
Respiratory medicine
Full Text
Introducción

Los sistemas nacionales de salud deben garantizar a los ciudadanos el cumplimiento de unos requisitos básicos como la equidad, la eficiencia, la calidad y la transparencia1. Así, deben permitir el acceso de todas las personas a una medicina de calidad, independientemente de su nivel económico y procedencia social; de igual manera, deben resolver los problemas sanitarios en el nivel de atención adecuado, evitando actos médicos que no aporten valor a los procesos asistenciales, así como disponer de información de la actividad y de los resultados en salud obtenidos a través de indicadores que permitan identificar disfunciones2 y facilitar el acceso de los ciudadanos a estos resultados. Además, los sistemas de salud deben integrar los nuevos recursos tecnológicos, explotar los sistemas de información y promover el trabajo en red de los distintos niveles asistenciales, garantizando la implementación clínica de los avances diagnósticos y terapéuticos3, con el objetivo de conseguir la máxima eficiencia y calidad de la atención que están obligados a prestar.

Los retos a los que se enfrentan hoy los sistemas de salud hacen necesaria una transformación del sector sanitario para mejorar su calidad y eficiencia, y contribuir a su sostenibilidad4. La mejora de los resultados en salud requiere una reorientación estratégica y avances en su implementación y evaluación. Para afrontar estos retos, la gestión clínica de un servicio de neumología debe tener un enfoque transversal; prestar cuidado tanto a la asistencia de los pacientes hospitalizados como de los ambulatorios; asegurar la atención de la cronicidad; organizar los diversos tipos de procesos asistenciales; integrar los niveles de atención implicados; disponer de un plan de reposición y dotación de recursos tecnológicos; desarrollar indicadores de calidad robustos y llevar a cabo una actividad docente e investigadora adaptada a sus medios.

En España, el Comité de Calidad Asistencial e Innovación de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (SEPAR) acredita unidades asistenciales, pero eso no significa que el servicio, como tal, cumpla con los mismos estándares de calidad. Hasta la fecha, ningún organismo ha abordado la evaluación de la calidad de los servicios de neumología desde el punto de vista asistencial, docente e investigador, ni ha definido qué indicadores habría que utilizar para ello.

En un momento en el que la crisis por la COVID-19 exige adaptar nuestras organizaciones a un nuevo escenario, el objetivo de este artículo es proponer una transformación de la organización en la atención de los servicios de neumología españoles basada en una estrategia orientada a buscar valor, utilizando indicadores que midan los resultados asistenciales, docentes e investigadores en aras del derecho que tienen los ciudadanos a conocer los resultados de salud de su área sanitaria. Para ello, deberían emplearse herramientas (mapa de procesos, procesos asistenciales, cuadro de mandos, etc.) que identifiquen oportunidades para mejorar la práctica clínica y la toma de decisiones en gestión sanitaria.

Visión actual de los sistemas de salud (cómo queremos ser)

Para llevar a cabo una propuesta de estas características, todos los profesionales con responsabilidades de gestión deberían estar formados y capacitados para liderar a sus respectivos equipos y organizaciones5 hacia la necesaria transformación del sistema. Así, tres aspectos parecen relevantes si se quiere conseguir este objetivo: 1) un sistema orientado hacia resultados en salud, 2) capaz de crear valor y 3) nuevos procedimientos para medir y evaluar el coste y los resultados.

La orientación a resultados en salud ha llegado para quedarse y estos deben conseguirse en el nivel asistencial menos complejo, conjugando así la eficiencia y la sostenibilidad del sistema que a menudo dejamos de lado. Para lograrlo, debemos tener en cuenta dos factores críticos: el cambio cultural de todos los implicados en la toma de decisiones (políticos, gestores y profesionales sanitarios) y la definición de una estrategia clara que pueda aplicarse en su entorno.

En el actual contexto de crisis sanitaria, económica y social, el hacerlo bien ya no es suficiente; hay que buscar valor, dado que alcanzar buenos resultados en salud es la misión fundamental de cualquier sistema sanitario. El enfoque no debe ser, por tanto, generar más volumen («hacer más»), sino más valor («hacerlo mejor»)6, porque este no se puede disociar del interés del paciente.

Algunas de las barreras a las que nos enfrentamos en el modelo actual son la escasa cultura de evaluación, ya que disponemos de un modelo poco adaptado a la medición de resultados, y la poca coordinación e integración clínica entre niveles. Por tanto, debemos ser capaces de incorporar un esquema que facilite el registro y el análisis de los resultados de nuestras prestaciones para obtener información sobre el éxito y los costes. El seguimiento permitiría, además, adaptar la atención, mejorando la calidad asistencial y reduciendo el gasto, como ya se ha hecho en distintos aspectos de la neumlogía7–10.

Herramientas de gestión

Una de las claves para la acreditación de los servicios de neumología11 sería medir sus resultados de salud a través de indicadores de calidad asistencial prefijados. Para mejorar estos resultados, debemos utilizar herramientas de gestión que puedan ayudarnos a conseguir nuestros objetivos.

Mapa de procesos. Un mapa de procesos es una representación gráfica de los procedimientos que lleva a cabo una organización12 (en este caso, un servicio de neumología). Consiste en un diagrama que contiene las líneas estratégicas y los procesos asistenciales, operativos y de soporte, que proporciona una perspectiva global del servicio y posiciona a cada uno de ellos respecto a la cadena de valor. Este diagrama debería condensar todos los procesos y subprocesos del servicio, así como la interrelación existente entre los mismos (fig. 1).

Figura 1.

Mapa de procesos de un servicio de Neumología.

AP: atención primaria; CC.EE: consultas externas; EPID: enfermedad pulmonar intersticial difusa; EPOC: enfermedad pulmonar obstructiva crónica; RR.HH.: recursos humanos; SERGAS: servicio gallego de salud; TEP: tromboembolismo pulmonar; UCI: unidad de cuidados intensivos.

(0.84MB).

Las líneas estratégicas gestionan la relación de la organización con el entorno y la forma en que se toman decisiones sobre la planificación y las mejoras de la institución. Suelen venir determinadas por la gerencia y se refieren a cómo opera la organización y se crea valor para el paciente y el sistema sanitario. Establece las pautas generales, directrices y límites de actuación del resto de la actividad. Cada servicio debe integrar su plan estratégico con el de su gerencia y el de su sistema de salud. Los procesos operativos están directamente vinculados con la prestación del servicio al paciente. Por último, aunque no estrechamente ligados a satisfacer las necesidades del usuario, los procesos de soporte son los que complementan los mecanismos operativos sin los cuales sería inviable una consecución de los objetivos. Tal es, por ejemplo, la asistencia informática a todos los departamentos.

Procesos asistenciales. Los procesos asistenciales definen de forma sistemática cómo debe ser la práctica clínica de acuerdo con la evidencia científica disponible. Integran la atención que se recibe en los diferentes niveles y facilitan la coordinación entre los profesionales, mejorando la continuidad asistencial y consiguiendo la atención integral del paciente. Contribuyen, por tanto, a definir circuitos asistenciales, favoreciendo la accesibilidad a los recursos sanitarios y evitando retrasos en la confirmación diagnóstica o en el tratamiento13,14.

En un servicio de neumología existen, al menos, seis procesos asistenciales que podríamos considerar prioritarios debido a su alta prevalencia o a su elevado impacto o complejidad: la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), el asma bronquial, el cáncer de pulmón, la enfermedad pulmonar intersticial difusa (EPID), el tromboembolismo pulmonar (TEP) y los trastornos respiratorios del sueño. El objetivo de los procesos asistenciales en estas patologías sería consensuar esta práctica para disminuir la variabilidad clínica, asegurar la continuidad de atención entre niveles, mejorar el control y la calidad de vida relacionada con la salud, conseguir diagnósticos precoces con fácil acceso a la técnicas diagnósticas, asegurar tratamientos tempranos y mejorar su adherencia, disminuir los episodios de reagudización y fomentar la educación sanitaria de pacientes y cuidadores.

Vías rápidas. Las vías rápidas surgen como resultado de la adaptación de los documentos utilizados en la gestión de la calidad industrial (los procedimientos normalizados de trabajo)15, cuyos objetivos eran mejorar la eficiencia en el uso de recursos y finalizar el trabajo en un tiempo establecido. Una vía rápida puede definirse como un plan asistencial ambulatorio que se aplica a un grupo de enfermos que presentan una determinada patología con un curso clínico predecible. Su implantación supone una reducción en los tiempos de atención y diagnóstico, pero no tiene por qué conllevar necesariamente una mejora de su supervivencia, como sucede en el cáncer de pulmón16.

Sus objetivos son disminuir la variabilidad de la práctica clínica, asignar responsabilidades, proporcionar respaldo legal a los profesionales, acelerar los procedimientos de registro de la organización, fomentar la investigación clínica, mejorar la calidad asistencial, especialmente en «incidentes adversos» y «complicaciones», y adecuar los recursos disponibles a las necesidades. Existen unas condiciones para definir y desarrollar una vía clínica: deben ser patologías frecuentes dentro del servicio/hospital, bien conceptualizadas, con un curso clínico predecible, variabilidad esperable baja que permita una atención homogénea, posibilidad de obtener un consenso profesional en el servicio/hospital que facilite una implantación multidisciplinar, que representen un riesgo importante para el paciente y que supongan un coste significativo para la institución. En nuestro servicio, se han implantado tres vías rápidas: cáncer de pulmón, EPID (fig. 2) y derrames pleurales.

Figura 2.

Modelo de vía rápida de las enfermedades pulmonares intersticiales difusas.

APA: anatomía patológica; BF: broncofibrobroncoscopia; CHUS: complejo hospitalario universitario de Santiago; CTO: cirugía torácica; EBUS: ultrasonografía endobronquial; ECG: electrocardiograma; EPID: enfermedad pulmonar intersticial difusa; NML: neumología; PFR: pruebas de función respiratoria; RDL: radiología; REU: reumatología; Rx: radiografía; TC AR: tomografía computarizada de alta resolución; VATS: cirugía toracoscópica asistida por video.

(0.88MB).

Consulta electrónica. La ambulatorización de algunos procesos (vías rápidas), así como la puesta en marcha de determinados recursos para reducir la cantidad de ingresos (consultas de alta resolución, hospital de día, etc.), ha provocado un aumento progresivo del número de consultas externas de neumología. Esto ha supuesto que en algunos hospitales se pusiera en marcha la consulta electrónica (e-Consulta), el medio por el cual los médicos de atención primaria, tras el registro de toda la información clínica pertinente, solicitan asesoramiento al neumólogo17, con excelentes resultados18. Este decide qué enfermos pueden beneficiarse de una asistencia hospitalaria y quiénes deben continuar en atención primaria, indicando la actuación a seguir.

La e-Consulta supone una serie de ventajas para los pacientes (tiempo de espera reducido en relación con la vía tradicional; atención más ágil y priorización de la demora en función de criterios clínicos definidos; disponibilidad de la opinión del especialista sin necesidad de desplazamiento a otros centros y trámites sencillos en caso de derivación; asistencia en su propio centro de salud, obtención de un informe escrito y legible; médicos de atención primaria y hospitalarios trabajando con conocimiento de su historia clínica y bajo una misma guía clínica), y también para los médicos, tanto de atención primaria (recibir informes de atención hospitalaria con la opinión sobre la conducta a seguir y la indicación o no de derivación, comunicación fluida, formación y aprendizaje continuado), como del hospital (recibir solicitudes que incluyan antecedentes, episodio actual, diagnóstico, tratamiento y motivo de la interconsulta según los criterios de la guía clínica, acceso a resultados analíticos e informes y comunicación fluida a través de un sistema seguro de acceso y transmisión de datos). En la figura 3 se muestra el procedimiento de derivación desde la atención primaria a neumología en nuestro hospital. El neumólogo responde en menos de tres días. La estimación es que, aproximadamente, el 40% de los pacientes podrán continuar en atención primaria y el resto deberán atenderse en Neumología en un plazo máximo de tres semanas, previa realización de las pruebas básicas (radiografía de tórax, espirometría o poligrafía respiratoria) que se consideren necesarias.

Figura 3.

Procedimiento general de derivación desde atención primaria a consultas externas de Neumología.

EFR: exploración funcional respiratoria; MAP: médico de atención primaria; NML: neumología; PGR: poligrafía respiratoria; Rx: radiografía de tórax.

(0.15MB).

Telemedicina. En los pacientes con patologías respiratorias crónicas y enfermedades neuromusculares en fase avanzada, además de tratar de mejorar la calidad y expectativa de vida mediante la aplicación, cada vez más generalizada, de soporte ventilatorio19, uno de los objetivos prioritarios es tratar de mantenerlos estabilizados, sin exacerbaciones. Con ello, se pretende evitar el aumento del riesgo de muerte en estas situaciones y reducir las visitas a urgencias, prevenir los reingresos20, disminuir la demanda de camas hospitalarias para pacientes agudos21 y reducir el coste de la atención.

En las enfermedades crónicas, se considera muy importante conocer el estado de salud de los pacientes y adelantarse a los posibles episodios de agravamiento de su patología de base. A ello podría contribuir, sin duda, la telemonitorización en el hogar (fig. 4). Hasta el momento, la enfermedad en la que existe más experiencia es la EPOC, probablemente porque conjuga su condición de enfermedad crónica con una alta prevalencia. Los resultados de la telemonitorización domiciliaria en los pacientes con EPOC son buenos, aunque no unánimes. Algunos estudios mostraron menos ingresos hospitalarios y menor mortalidad durante el año de seguimiento22, una disminución de la mortalidad o tasa de reingresos a los 12 meses23 y una reducción de las tasas de hospitalización y de las visitas a urgencias, aunque sin influencia en la mortalidad24. Sin embargo, otros no encontraron diferencias significativas en estas variables25.

Figura 4.

Arquitectura de la telemonitorización desde el hospital o centro de salud a pacientes en su domicilio.

(0.46MB).

Cuadro de mandos. El cuadro de mandos es un documento que contiene un conjunto de indicadores, fijados previamente, que proporcionan información sobre la consecución de los objetivos y metas propuestas, que también permiten la comparación con los resultados obtenidos por otros servicios26. La aplicación de esta herramienta puede servir como estímulo para enriquecer la gestión clínica, entendida como el uso de todo tipo de recursos para el mejor cuidado de los enfermos27,28. Esta información puede hacer posible que los profesionales ejerzan una capacidad de dirección cada vez mayor y puedan adoptar medidas para mejorar los resultados en la atención a sus pacientes29.

Propuesta de control de la calidad asistencial

Medir la calidad de la atención sanitaria es, en nuestra opinión, uno de los mejores instrumentos para llevar a cabo una política sanitaria que defienda a los ciudadanos. Lo que no se mide no existe y, por tanto, no se puede mejorar. Para ello, debemos seleccionar los indicadores obtenidos periódicamente que nos permitan conocer la calidad y la eficiencia de nuestra actividad asistencial, identificar las oportunidades de mejora en nuestros servicios, poder comparar los resultados con los de los centros de referencia de nuestra especialidad y observar si estos presentan diferencias relevantes con los de otros, incluso con los mismos recursos, lo que debería llevarnos a una corrección inmediata, o a identificar duplicidades injustificadas que nos obligaría a desarrollar redes asistenciales integradas.

A continuación, presentamos una propuesta de indicadores que reflejarían la eficiencia de nuestra organización y que, con base en los resultados de salud obtenidos, deberían conducirnos a la acreditación de los servicios de neumología. Nuestra pretensión con esta propuesta es, únicamente, estimular la reflexión y la discusión. Asesorada por profesionales externos implicados en la organización, evaluación y auditoría de la gestión clínica, debería ser la SEPAR, a través de su comité de calidad asistencial e innovación, quien tuviera la última palabra a la hora de seleccionar los indicadores que evalúen mejor la calidad de la atención sanitaria prestada dentro de cada área asistencial.

La tabla 1 muestra la propuesta de indicadores, en números absolutos, y la frecuencia de medición. Pensados para hospitales terciarios, podría ser más apropiado expresarlos por índices y adecuarlos a cada organización, para no perjudicar a los servicios con un menor volumen de pacientes. Dejamos para la comisión evaluadora su selección final, así como los niveles de acreditación (por ejemplo, 1, 2 y 3) con base en el grado de cumplimiento del conjunto de indicadores que hemos consensuado entre los autores de este artículo y agrupado de acuerdo con las distintas áreas asistenciales de un servicio de neumología.

Tabla 1.

Propuesta de indicadores de calidad de un servicio de Neumología

Indicador  Estándar  Frecuencia medición   
Hospitalización convencional
Número de ingresos  > 1.300  Trimestral 
Frecuentación (n.° ingresos/1.000 habitantes)  ≤ 6  Anual 
Número de ingresos programados  < 10%  Trimestral 
Estancia media  < 9 días  Trimestral 
Reingresos 8 días  < 5%  Anual 
Reingresos 30 días  < 10%  Anual 
Mortalidad  < 5%  Semestral 
Tasa de reclamaciones (n.° reclamaciones/n.° ingresos)  < 1%  Anual 
Cuidados intermedios respiratorios
Número de ingresos  >200  Trimestral 
10  Estancia media  < 7 días  Trimestral 
11  Mortalidad  < 8%  Anual 
12  Existencia procedimientos normalizados/protocolos adaptados a la UCRI  Sí  Anual 
13  Úlceras cutáneas derivadas de la utilización de la interfase  < 10%  Trimestral 
14  Úlceras de presión en pacientes con ventilación no invasiva  < 10%  Trimestral 
Cuidados intensivos respiratorios
15  Número de ingresos  >100  Anual 
16  Estancia media  < 10 días  Anual 
17  Mortalidad  < 10%  Anual 
18  Existencia procedimientos normalizados/protocolos adaptados a la UCI  Sí  Anual 
19  Neumonía asociada a ventilación invasiva  < 7 episodios/1.000 días de ventilación  Trimestral 
20  Bacteriemia relacionada con el catéter venoso central  < 4 episodios/1.000 días de catéter venoso central  Trimestral 
Consultas generales
21  Número de e-Consultas anuales  > 3.500  Trimestral 
22  Tiempo de espera media de e-Consultas  < 4 días  Trimestral 
23  Porcentaje de e-consultas derivadas a Atención primaria  > 30%  Trimestral 
24  Numero de primeras consultas presenciales anuales  > 2.000  Trimestral 
25  Número de consultas totales  > 10.000  Trimestral 
26  Relación sucesivas/primeras  < 4  Trimestral 
27  Espera media primera consulta presencial  25 días  Trimestral 
28  Espera media a consulta de primera vez (acto único)  15 días  Trimestral 
29  Tasa de reclamaciones (n.° reclamaciones/n.° consultas totales)  < 1,5%  Anual 
Tromboembolismo pulmonar
30  Número de pacientes ingresados en NML al año por TEP  > 50  Anual 
31  Estancia media hospitalaria anual  < 8 días  Anual 
32  Existencia de protocolos de actuación específicos  Sí  Anual 
33  Número de pacientes con PESI/PESI simplificado calculado  > 75%  Anual 
34  Mortalidad intrahospitalaria  < 10%  Anual 
35  Reingresos a 30 días  < 8%  Anual 
36  Número de pacientes nuevos anuales en consultas externas  > 50  Anual 
37  Pacientes seguidos consulta monográfica  > 75% ingresados  Anual 
38  Hemorragias mayores no fatales a 30 días  < 4%  Anual 
39  Mortalidad por todas las causas a 30 días  < 10%  Anual 
Hipertensión pulmonar
40  Neumólogo acreditado  Sí  Anual 
41  Consulta monográfica  Sí  Anual 
42  Unidad multidisciplinar hospitalaria  Sí  Anual 
43  Demora media primera consulta  < 21 días  Anual 
44  Número de pacientes atendidos anuales (nuevos/totales)  10/50  Anual 
45  Disponibilidad de ecocardiografía  Sí  Anual 
46  Disponibilidad cateterismo derecho  Sí  Anual 
47  Disponibilidad de administrar medicación de forma ambulatoria  Sí  Anual 
EPOC
48  Neumólogo con formación acreditada en EPOC  Sí  Anual 
49  Número de pacientes ingresados en NML al año por EPOC  > 350  Anual 
50  Estancia media hospitalaria anual  < 9 días  Anual 
51  Existencia de protocolos de actuación específicos  Sí  Anual 
52  Consulta monográfica  Sí  Anual 
53  Número de pacientes atendidos al año (nuevos/totales)  > 100 / > 1.000  Anual 
54  Disponibilidad de enfermera gestora de casos (coordinación con otras unidades, gestión de pruebas y citas, etc.)  Sí  Anual 
55  Posibilidad de atención urgente en la Unidad de una exacerbación  Sí  Anual 
56  Disponibilidad de espirometría inmediata  Sí  Anual 
57  Disponibilidad de radiografía de tórax inmediata  Sí  Anual 
Asma
58  Número de pacientes atendidos al año  > 500  Anual 
59  Posibilidad de atención urgente de una exacerbación  Sí  Anual 
60  Número de exacerbaciones atendidas al año  >50  Anual 
61  Unidad multidisciplinar hospitalaria  Sí  Anual 
62  Consulta monográfica asma control difícil  Sí  Anual 
63  Espirometría inmediata  Sí  Anual 
64  Provocación bronquial inespecífica  Sí  Anual 
65  Provocación bronquial específica  Sí  Anual 
66  Óxido nítrico exhalado  Sí  Anual 
67  Esputo inducido con recuento de células inflamatorias  Sí  Anual 
68  Disponibilidad de realizar prick-test en la Unidad  Sí  Anual 
69  Administración de fármacos biológicos para el asma en la Unidad  Sí  Anual 
Rehabilitación Respiratoria
70  Número de pacientes nuevos anuales  > 75  Anual 
71  Días transcurridos entre el alta y la primera consulta  < 30 días  Anual 
72  Pacientes con EPOC ingresados dirigidos a un programa de RR  > 80%  Anual 
73  Capacidad para tratar agudizaciones tras sesión de RR  Sí  Anual 
74  Protocolo para rehabilitación respiratoria en pacientes con EPOC  Sí  Anual 
Ventilación no invasiva domiciliaria
75  Formación acreditada de ventilación no invasiva  Sí  Anual 
76  Consulta monográfica de ventilación domiciliaria  Sí  Anual 
77  Número de pacientes anuales (nuevos/totales)  > 30 / > 200  Anual 
78  Posibilidad de atención urgente ambulatoria  < 15 días  Anual 
79  Posibilidad de inicio de ventilación domiciliaria de forma ambulatoria  Sí  Anual 
80  Disponibilidad de protocolos asistenciales de ventilación domiciliaria  Sí  Anual 
Tabaquismo
81  Formación acreditada tabaquismo  Sí  Anual 
82  Número de pacientes anuales (nuevos/totales)  ≥ 200 / ≥ 600  Anual 
83  Número de cooximetrías anuales  ≥ 600  Anual 
84  Número de determinaciones de cotinina  ≥ 40  Anual 
85  Disponibilidad de enfermera en la Unidad  Sí  Anual 
86  Disponibilidad de psicólogo en la Unidad  Sí  Anual 
Oxigenoterapia
87  Disponibilidad de enfermera gestora de casos de oxigenoterapia  Sí  Anual 
88  Pacientes con revisión de prescripción de oxigenoterapia tras prescripción provisional  > 80%  Anual 
89  Pacientes con titulación de oxígeno en reposo  > 90%  Anual 
Enfermedad pulmonar intersticial difusa
90  Formación acreditada EPID  Sí  Anual 
91  Consulta monográfica  Sí  Anual 
92  Número de pacientes anuales (nuevos/totales)  > 40 / > 200  Anual 
93  Número lavados broncoalveolares/biopsia transbronquial anuales  > 30  Anual 
94  Número de criobiopsias anuales  > 25  Anual 
95  Número de VATS anuales  > 7  Anual 
96  Disponibilidad ecocardiografía  Sí  Anual 
97  Disponibilidad cateterismo derecho  Sí  Anual 
Bronquiectasias y fibrosis quística
98  Neumólogo acreditado  Sí  Anual 
99  Unidad multidisciplinar de FQ en el hospital  Sí  Anual 
100  Número de pacientes nuevos anuales (BQ / FQ)  > 75 / > 10  Anual 
101  Hospital de día para tratar agudizaciones  Sí  Anual 
102  Realización de test de tolerancia a antibióticos y suero hipertónico  Sí  Anual 
103  Posibilidad de administrar antibióticos IV ambulatoriamente  Sí  Anual 
104  Capacidad de realizar espirometrías en el día  Sí  Anual 
105  Fisioterapeuta  Sí  Anual 
Trastornos respiratorios del sueño
106  Neumólogo acreditado en sueño por la CEAMS  Sí  Anual 
107  Consulta monográfica  Sí  Anual 
108  Unidad multidisciplinar de sueño en el hospital  Sí  Anual 
109  Número de polisomnografías anuales  > 150  Anual 
110  Número de poligrafías respiratorias anuales  > 300  Anual 
111  Demora en casos no urgentes  < 90 días  Anual 
112  Demora en casos urgentes  < 15 días  Anual 
113  Programa estandarizado de educación  Sí  Anual 
114  Nuevas indicaciones de CPAP al año  > 25% pacientes estudiados por sospecha de SAHS  Anual 
115  Control objetivo de horas de cumplimiento de la CPAP  Sí  Anual 
116  Tiempo entre la realización de la prueba diagnóstica y el inicio de la CPAP  < 60 días  Anual 
117  Pacientes que cumplen al menos 4 horas diarias de CPAP prescrita por SAHS  > 70%  Anual 
Neumonías
118  Evaluación PSI y CURB-65 al ingreso  > 90%  Anual 
119  Porcentaje pacientes ingresados con PSI I y II  < 10%  Anual 
120  Tiempo transcurrido entre la llegada a urgencias y el inicio del antibiótico  < 8 horas  Anual 
121  Hemocultivos disponibles en las primeras 72 horas  100%  Anual 
122  Existencia de un programa de optimización del uso de antimicrobianos (PROA) en el hospital  Sí  Anual 
123  Tratamiento antibiótico secuencial (cambio a vía oral)  90%  Anual 
124  Estancia hospitalaria media  < 7 días  Trimestral 
125  Consulta monográfica  Sí  Anual 
126  Demora primera consulta pacientes ambulatorios < 72 horas  90%  Anual 
Tuberculosis
127  Capacidad de acceso rápido a la consulta  ≤ 2 días  Anual 
128  Unidad multidisciplinar en el hospital  Sí  Anual 
129  Consulta monográfica  Sí  Anual 
130  Número de pacientes nuevos anuales  > 30  Anual 
131  Capacidad de diagnóstico rápido (< 3 horas)  Sí  Anual 
132  Enfermera gestora de casos  Sí  Anual 
133  Laboratorio de micobacterias acreditado (baciloscopias, cultivos en medios sólido-líquido, identificación MTB y alguna no TB, test moleculares identificación MTB, resistencia molecular rápida a rifampicina, antibiogramas fármacos primera línea, test genéticos de resistencias)  Sí  Anual 
Hospital de día
134  Número de enfermos anuales  > 800  Anual 
135  Posibilidad de administrar tratamientos a pacientes ambulatorios de acuerdo con protocolos establecidos  Sí  Anual 
136  Posibilidad de tratar agudizaciones de los pacientes reingresadores  Sí  Anual 
137  Atención telefónica a demanda de los pacientes incluidos en el programa     
Vía rápida cáncer de pulmón
138  Número de pacientes nuevos anuales  250  Semestral 
139  Tiempo a la primera consulta  < 15 días  Semestral 
140  Tiempo hasta el diagnóstico (desde la primera consulta)  < 15 días  Semestral 
141  Tiempo hasta el fin del estadiaje (desde la primera consulta)  < 25 días  Semestral 
142  Comité Multidisciplinar de Tumores  Reunión semanal  Anual 
Vía rápida enfermedad pulmonar intersticial difusa
143  Número de pacientes/año (nuevos/totales)  50/200  Anual 
144  Tiempo a la primera consulta  < 2 semanas  Semestral 
145  Tiempo lista de espera para criobiopsia  < 30 días  Semestral 
146  Tiempo al diagnóstico  < 45 días  Semestral 
147  Reunión Comité EPID  Reunión mensual  Anual 
Vía rápida derrame pleural
148  Número de pacientes/año (nuevos/totales)  > 125 / > 400  Anual 
149  Tiempo a la primera consulta  ≤ 3 días  Anual 
150  Tiempo de respuesta a la interconsulta  ≤ 2 días  Anual 
151  Tiempo al diagnóstico  ≤ 15 días  Anual 
152  Reunión Comité Pleura  Mensual  Anual 
Procesos asistenciales integrados (elaborados en el hospital/CCAA) y aplicados
153  EPOC  Sí  Anual 
154  Asma bronquial  Sí  Anual 
155  Cáncer de pulmón  Sí  Anual 
156  Enfermedad pulmonar intersticial difusa  Sí  Anual 
157  Tromboembolismo pulmonar  Sí  Anual 
158  Trastornos respiratorios del sueño  Sí  Anual 
Bronquiectasias y fibrosis quística
159  Neumólogo acreditado  Sí  Anual 
160  Unidad multidisciplinar de FQ en el hospital  Sí  Anual 
161  Número de pacientes nuevos anuales (BQ/ FQ)  > 75/ > 10  Anual 
162  Hospital de día para tratar agudizaciones  Sí  Anual 
163  Realización de test de tolerancia a antibióticos y suero hipertónico  Sí  Anual 
164  Posibilidad de administrar antibióticos IV ambulatoriamente  Sí  Anual 
165  Capacidad de realizar espirometrías en el día  Sí  Anual 
166  Fisioterapeuta  Sí  Anual 
Cuidados paliativos respiratorios
167  Estructura de la composición del equipo interdisciplinar  100%  Anual 
168  Protocolo de coordinación entre la hospitalización y la atención a domicilio de acuerdo con los recursos del área  100%  Anual 
169  Evaluación inicial de las necesidades de los pacientes  100%  Anual 
170  Definir cómo accede a la Unidad en caso de urgencia  100%  Anual 
171  El paciente debe tener definido un plan farmacoterapéutico  > 90%  Anual 
Atención domiciliaria
172  Número de pacientes atendidos en un año  > 50  Anual 
173  Número de visitas domiciliarias  1 al mes  Trimestral 
174  Posibilidad de atención urgente domiciliaria especializada  Sí  Semestral 
175  Posibilidad de atención urgente en el servicio (no Urgencias)  Sí  Semestral 
176  El paciente debe tener definido un plan farmacoterapéutico  > 90%  Semestral 
177  La unidad debe disponer por escrito los criterios de admisión de pacientes  100%  Anual 
Guardias médicas
178  Guardias de Neumología  Sí  Anual 
179  Guardias de área médica con neumólogo las 24 h/día  Sí  Anual 
Exploración funcional respiratoria
180  Número de espirometrías forzadas anuales  ≥ 2.000  Anual 
181  Número de difusiones anuales  ≥ 500  Anual 
182  Número de pletismografías anuales  ≥ 100  Anual 
183  Número de FeNOs anuales  ≥ 1.000  Anual 
184  Número de test de la marcha de 6 min anuales  ≥ 200  Anual 
185  Número de pruebas de esfuerzo cardiopulmonar anuales  ≥ 100  Anual 
186  Número de pruebas de broncoprovocación inespecífica anuales  ≥ 100  Anual 
187  Número de pruebas de broncoprovocación específicas anuales  ≥ 20  Anual 
188  Número de oscilometrías anuales  ≥ 20  Anual 
189  Número de determinaciones de PIM/PEM anuales  ≥ 30  Anual 
Técnicas broncoscópicas
190  Número de procedimientos broncoscopia flexible anuales  ≥ 500  Anual 
191  Número de procedimientos ecobroncoscopia anuales  ≥ 200  Anual 
192  Número de terapéuticas endobronquiales anuales  ≥ 10  Anual 
193  Número de broncoscopias rígidas anuales  ≥ 10  Anual 
194  Número de criobiopsias anuales  ≥ 30  Anual 
195  Información escrita de acogida  100%  Anual 
196  Información escrita específica del procedimiento a realizar  100%  Anual 
197  Instrucciones y recomendaciones escritas  100%  Anual 
198  Salas diferenciadas por procedimientos  Sí  Anual 
199  Sala plomada  Sí  Anual 
200  Disponibilidad de quirófano  Sí  Anual 
201  Mortalidad  < 0,05%  Anual 
Técnicas pleurales
202  Número de toracocentesis diagnósticas anuales  ≥ 250  Anual 
203  Número de toracocentesis terapéuticas anuales  ≥ 100  Anual 
204  Número de biopsias pleurales cerradas anuales  ≥ 30  Anual 
205  Número de drenajes torácicos anuales  ≥ 50  Anual 
206  Número de catéteres pleurales tunelizados anuales  ≥ 15  Anual 
207  Número de pleurodesis con talco  ≥ 20  Anual 
208  Número de ecografías transtorácicas anuales  ≥ 400  Anual 
209  Número de pleuroscopias médicas anuales  ≥ 10  Anual 
210  Información escrita de acogida  Sí  Anual 
211  Información escrita específica del procedimiento a realizar  Sí  Anual 
212  Instrucciones y recomendaciones escritas  Sí  Anual 
213  Salas diferenciadas por procedimientos  Sí  Anual 
214  Disponibilidad de quirófano  Sí  Anual 
215  Mortalidad  < 0,05%  Anual 
Trasplante pulmonar
216  Trasplante pulmonar en el hospital  Sí  Anual 
Indicadores de docencia
217  Formación residentes  Sí  Anual 
218  Prácticas clínicas alumnos pregrado  Sí  Anual 
219  Encuestas de satisfacción alumnos de prácticas  Sí  Anual 
220  Elaboración de protocolos de salud dirigidos a pacientes, cuidadores, etc.  Sí  Anual 
221  Neumólogos con certificado de colegiación-desarrollo profesional SEPAR  ≥ 2  Anual 
222  Doctores en Medicina en el servicio  ≥ 4  Anual 
223  Cursos post-grado universidad  Sí  Anual 
224  Dirección tesis doctorales anuales (5 años)  ≥ 2  Anual 
225  Profesores asociados en el servicio  ≥ 1  Anual 
226  Neumólogos del servicio acreditados como profesor contratado doctor, titular o catedrático  ≥ 2  Anual 
227  Profesores titulares en el servicio  ≥ 1  Anual 
228  Catedráticos en el servicio  ≥ 1  Anual 
Indicadores de investigación
229  Comunicaciones congresos nacionales/internacionales  ≥ 30  5 años 
230  Publicaciones científicas en revistas con FI  ≥ 30  5 años 
231  Proyectos competitivos de investigación  ≥ 3  5 años 
232  Participación en redes (PII, CIBERES)  Sí  5 años 
233  Contratos de investigación  ≥ 1  5 años 
234  Ensayos clínicos  ≥ 5  5 años 
235  Innovación tecnológica/patentes  ≥ 1  5 años 

BQ: bronquiectasias; CEAMS: Comité Español de Acreditación Medicina del Sueño; CIBERES: centro de investigación biomédica en red enfermedades respiratorias; CPAP: presión positiva continua en la vía aérea; CURB-65: confusión, urea, frecuencia respiratoria, tensión arterial y edad (> 65 años); EPID: enfermedad pulmonar intersticial difusa; EPOC: enfermedad pulmonar obstructiva crónica; FeNO: fracción exhalada de óxido nítrico; FI: factor de impacto; FQ: fibrosis quística; MTB: mycobacterium tuberculosis; NML: neumología; PAI: proceso asistencial integrado; PESI: pulmonary embolism severity index; PESIs: pulmonary embolism severity index simplificado; PII: programas integrados de investigación; PIM/PEM: presión inspiratoria y espiratoria máxima; PSI: pneumonia severity index; RR: rehabilitación respiratoria; SAHS: síndrome de apnea-hipopnea del sueño; SEPAR: Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica; TB: tuberculosis; TEP: tromboembolismo pulmonar; UCI: unidad de cuidados intensivos; UCRI: unidad de cuidados respiratorios intermedios; VATS: cirugía toracoscópica videoasistida.

Docencia

Los servicios de neumología también deberán evaluarse desde el punto de vista docente, ya que como dice la Ley General de Sanidad en su artículo 104, «toda la estructura asistencial del sistema sanitario debe estar en disposición de ser utilizada para la docencia pregraduada, postgraduada y continuada de los profesionales».

Los aspectos que los autores del artículo consideramos que deberían evaluarse serían la participación de los servicios de neumología en la formación de los alumnos de grado de medicina, impartiendo las prácticas clínicas médicas a lo largo de los distintos cursos (docencia pregrado); la acreditación ante la Comisión Nacional de Docencia para formar especialistas en neumología (docencia postgrado); el número de tesis doctorales anuales dirigidas (formación continuada), así como la cantidad de profesores asociados, titulares y catedráticos con los que cuenta cada servicio. Por supuesto, esto no deja de ser una propuesta y, como en el apartado de resultados de salud, sería la SEPAR y el comité evaluador quienes decidirían los criterios a considerar. En este sentido, en Europa, la iniciativa HERMES trata de garantizar que todas las redes de centros de formación en medicina respiratoria tengan la oportunidad de obtener una certificación acreditada para sus programas educativos30.

Investigación

La investigación en un servicio de neumología debe estar reconocida en el desarrollo de sus profesionales ya que, sin duda, contribuye a mejorar la calidad asistencial tanto del propio neumólogo, como la de su servicio y la del hospital. Esto se debe a que esta genera nuevo conocimiento, favorece la formación continuada y el estímulo profesional, puede atraer nuevos recursos económicos y contribuye a mejorar la imagen de la institución y, por tanto, del orgullo por pertenecer a un centro prestigioso31. Para hacer investigación, es recomendable que los neumólogos nos integremos en estructuras en red, como los proyectos de la SEPAR o los centros de investigación biomédica o CIBER de enfermedades respiratorias del Instituto de Salud Carlos III. Sería también importante que el hospital cuente con el respaldo de una fundación de investigación sanitaria, a ser posible apoyada también por la universidad, que potencie esta labor, así como la coordinación entre las distintas unidades investigadoras del hospital, instituciones sanitarias y universidad, estimulando las vocaciones investigadoras. Además, las fundaciones pueden colaborar, tanto a favorecer el concurrir en buenas condiciones a las convocatorias públicas de financiación de la investigación, como a reducir el coste de los proyectos, al poner a nuestra disposición su estructura o sus propios fondos para hacer la inversión necesaria (fig. 5).

Figura 5.

La investigación en un servicio de neumología apoyada en el hospital, universidad, fundación, el consorcio de investigación (Campus Vida) y las estructuras en red (CIBERES y PIIs).

Fidis: Fundación Instituto de investigación sanitaria de Santiago de Compostela; USC: Universidad de Santiago de Compostela.

(0.54MB).
Conclusiones

La sociedad demandará, cada vez más, unos servicios sanitarios de alta calidad y reclamará el derecho a conocer los resultados de salud de su área sanitaria. Esto obligará a que todos los servicios tengan que demostrar, de forma objetiva, sus competencias y, para ello, muy probablemente, tengan que acreditarse de forma global. En la actualidad, una de las debilidades del sistema sanitario es la falta de control de los indicadores de los que disponemos, lo que conlleva una variabilidad inaceptable en nuestra práctica clínica. Esta exigencia social puede contribuir a que el sistema sanitario promueva la necesidad de medir sus resultados a través de indicadores de calidad asistencial, mejorar la gestión clínica y estimular a los profesionales para que ejerzan una capacidad de dirección cada vez mayor.

Financiación

Este trabajo no ha recibido ningún tipo de financiación.

Conflicto de intereses

Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.

Bibliografía
[1]
Y. Shiozaki, J. Philpot, M. Touraine, G.H. Gröhe, B. Lorenzin, J. Hunt, et al.
G7 Health Ministers’ Kobe Communiqué.
Lancet., 388 (2016), pp. 1262-1263
[2]
M.E. Porter, S. Larsson, T.H. Lee.
Standardizing patient outcomes measurement.
N Engl J Med., 374 (2016), pp. 504-506
[3]
A. Cequier, B. Ortiga.
Niveles de gestión clínica.
Rev Esp Cardiol., 68 (2015), pp. 465-468
[4]
A. Cequier, A. García-Altés.
Transparencia y comparación de resultados para la sostenibilidad del sistema sanitario.
Med Clin (Barc)., 144 (2015), pp. 449-451
[5]
T.H. Lee.
Turning doctors into leaders.
Harv Bus Rev., 88 (2010), pp. 50-58
[6]
V.S. Lee, K. Kawamoto, R. Hess, C. Park, J. Young, C. Hunter, et al.
Implementation of a value-driven outcomes program to identify high variability in clinical costs and outcomes and association with reduced cost and improved quality.
JAMA., 316 (2016), pp. 1061-1072
[7]
H. Rea, S. McAuley, A. Stewart, C. Lamont, P. Roseman, P. Didsbury.
A chronic disease management programme can reduce days in hospital for patients with chronic obstructive pulmonary disease.
Intern Med J., 34 (2004), pp. 608-614
[8]
F. Cots, J. Raventòs, P. Ausín, P. Chiarello, E. Balcells, X. Castells, et al.
Hospital de día: análisis de resultados, costes y asignación de recursos en neumología.
Arch Bronconeumol., 49 (2013), pp. 54-62
[9]
J.M. Figueira-Gonçalves, M.C. Hernández-Gracia, J.J. Batista-Martín.
Una nueva gestión ambulatoria basada en la consulta virtual de neumología Una medida efectiva en tiempos de «austeridad».
Arch Bronconeumol., 52 (2016), pp. 279-280
[10]
M. Spielmanns, D. Bost, W. Windisch, P. Alter, T. Greulich, C. Nell, et al.
Measuring sleep quality and efficiency with an activity monitoring device in comparison to polysomnography.
J Clin Med Res., 11 (2019), pp. 825-833
[11]
Joint Commission International accreditation standards for hospitals: including standards for Academic Medical Center Hospitals.
Joint Commission on Accreditation of Healthcare Organizations.
7 th ed., Oak Brook, (2020),
[12]
G. Antonacci, J.E. Reed, L. Lennox, J. Barlow.
The use of process mapping in healthcare quality improvement projects.
Health Serv Manage Res., 31 (2018), pp. 74-84
[13]
R. Gomis, M. Mata-Cases, D. Mauricio-Puente, S. Artola-Menéndez, J. Ena-Muñoz, J.J. Mediavilla-Bravo, et al.
Aspectos metodológicos de los procesos asistenciales integrados (PAI).
Rev Calid Asist., 32 (2017), pp. 234-239
[14]
Xunta de Galicia. Proceso asistencial integrado enfermidade pulmonar obstrutiva crónica (EPOC). Documento organizativo. https://www.sergas.es/Asistencia-sanitaria/Documents/623/Documento%20organizativo%20da%20enfermidade%20pulmonar%20obstrutiva%20cr%C3%B3nica.%20Epoc.pdf
[15]
V. Isaman, R. Thelin.
Standard operating procedures (SOPs): reason for, types of, adequacy, approval, and deviations from and revisions to.
Qual Assur., 4 (1995), pp. 167-171
[16]
S. Bagcchi.
Lung cancer survival only increases by a small amount despite recent treatment advances.
Lancet Respir Med., 5 (2017), pp. 169
[17]
E. Viedma-Guiard, P. Agüero, L. Crespo-Araico, C. Estévez-Fraga, G. Sánchez-Díez, J.L. López-Sendón, et al.
El correo electrónico en la consulta de Parkinson: ¿soluciones a un clic?.
Neurología., 33 (2018), pp. 107-111
[18]
D. Rey-Aldana, S. Cinza-Sanjurjo, M. Portela-Romero, J.L. López-Barreiro, A. García-Castelo, J.M. Pazos-Mareque, et al.
Programa de consulta electronica universal (e-consulta) de un servicio de Cardiología Resultados a largo plazo.
[19]
A.S. Sahni, L. Wolfe.
Respiratory care in neuromuscular diseases.
Respir Care., 63 (2018), pp. 601-608
[20]
K.L. Rice, N. Dewan, H.E. Bloomfield, J. Grill, T.M. Schult, D.B. Nelson, et al.
Disease management program for chronic obstructive pulmonary disease: a randomized controlled trial.
Am J Respir Crit Care Med., 182 (2010), pp. 890-896
[21]
R.V. Tuckson, M. Edmunds, M.L. Hodgkins.
Telehealth.
N Engl J Med., 377 (2017), pp. 1585-1592
[22]
A. Steventon, M. Bardsley, J. Billings, J. Dixon, H. Doll, S. Hirani, et al.
Effect of tele-health on use of secondary care and mortality: findings from the Whole System Demonstrator cluster randomised trial.
BMJ., 344 (2012), pp. e3874
[23]
P.J. Marcos, C. Represas-Represas, C. Ramos, B. Cimadevila-Álvarez, A. Fernández-Villar, A. Fraga-Liste, et al.
Impact of a home telehealth program after a hospitalized COPD exacerbation: a propensity score analysis.
[24]
J. Polisena, K. Tran, K. Cimon, B. Hutton, S. McGill, K. Palmer, et al.
Home telehealth for chronic obstructive pulmonary disease: a systematic review and meta-analysis.
J Telemed Telecare., 16 (2010), pp. 120-127
[25]
H. Pinnock, J. Hanley, L. McCloughan, A. Todd, A. Krishan, S. Lewis, et al.
Effectiveness of telemonitoring integrated into existing clinical services on hospital admission for exacerbation of chronic obstructive pulmonary disease: researcher blind, multicentre, randomised controlled trial.
BMJ., 347 (2013), pp. f6070
[26]
M.B. Gonzalez-Sanchez, L. Broccardo, A.M. Martins Pires.
The use and design of the BSC in the health care sector: A systematic literature review for Italy Spain, and Portugal.
Int J Health Plann Manage., 33 (2018), pp. 6-30
[27]
J. Varela, X. Castells, C. Iniesta, F. Cots.
Instrumentos de la gestión clínica: desarrollo y perspectivas.
Med Clin (Barc)., 130 (2008), pp. 312-318
[28]
C. Bermúdez-Tamayo, A. Olry-de Labry, L. García-Mochón.
Identificación de indicadores de buenas prácticas en gestión clínica y sanitaria.
J Healthc Qual Res., 33 (2018), pp. 109-118
[29]
M.E. Porter, E.O. Teisberg.
How physicians can change the future of health care.
JAMA., 297 (2007), pp. 1103-1111
[30]
R. Loddenkemper, T. Séverin, S. Mitchell, P. Palange, Adult HERMES Task Force.
HERMES criteria for accreditation of european training centres: overcoming challenges of accreditation.
Eur Respir J., 36 (2010), pp. 1239-1241
[31]
C.A. García-Navarro, F. Pozo Rodríguez.
La investigación en un servicio de Neumología.
Organización de un Servicio de Neumología: estructura, recursos y funcionamiento, pp. 237-242
Copyright © 2021. SEPAR
Archivos de Bronconeumología
Article options
Tools

Are you a health professional able to prescribe or dispense drugs?