Como radiólogo me gustaría felicitar a los autores del artículo «Cribado de cáncer de pulmón con tomografía computarizada de baja dosis después del National Lung Screening Trial. El debate continúa abierto» por la exhaustiva revisión que han realizado sobre este controvertido tema de actualidad, así como mostrar mi acuerdo con la mayor parte del mismo, especialmente en lo que concierne a la idea de que un programa de detección precoz de cáncer de pulmón con tomografía computarizada de baja dosis (LDCT por sus siglas en inglés) debe contemplarse dentro de un proceso estructurado y multidisciplinar1.
No obstante, existen algunas inconsistencias entre el título de su artículo, en el que parece reconocerse el hito que supone el National Lung Screening Trial (NLST), y las recomendaciones que realizan basándose en las heterogéneas características y variados resultados de los diferentes programas de cribado de cáncer de pulmón realizados hasta la fecha. Algunos de los datos que recogen los autores (referentes a la exposición a la radiación o a la anchura de la colimación de la LDCT, por ejemplo) y que supuestamente utilizan para basar algunas de sus recomendaciones son discutibles o, cuando menos, más propios de estudios de cribado primitivos e inaceptables según los estándares fijados por el NLST2–5. En cuanto al impacto económico, existen datos preliminares que sugieren que un programa de detección precoz de cáncer de pulmón con LDCT no solo costaría menos que otros programas de cribado de cáncer ampliamente aceptados (cérvix, mama), sino que en comparación con estas neoplasias el coste por año de vida ganado resultaría también más favorable6,7.
El diseño del NLST y sus resultados suponen un punto de inflexión al ser el primer ensayo clínico aleatorizado en demostrar una reducción de la mortalidad específica por cáncer de pulmón del 20,3% en una población de alto riesgo. Aunque todavía existen preguntas sin respuesta y desafíos por mejorar, la principal conclusión del NLST es que el cribado con LDCT en un determinado grupo de riesgo reduce la mortalidad por cáncer de pulmón. La mayor parte de los ensayos clínicos previos (con un diseño subóptimo y poblaciones estudiadas menores) han demostrado que la LDCT es una herramienta diagnóstica útil para detectar precozmente tumores pulmonares en sujetos de riesgo, pero carecen de la consistencia y la calidad del NLST. Por tanto, creo que el verdadero punto de partida a la hora de realizar recomendaciones actualizadas sobre un hipotético programa de cribado de cáncer de pulmón debe ser el NLST.
El comentario de los autores «… no recomendamos el cribado de cáncer de pulmón con TC de baja dosis para fumadores o exfumadores fuera del contexto de la recomendación individual» no es coherente con la principal conclusión del NLST (la reducción de la mortalidad específica por cáncer de pulmón mediante LDCT en un grupo de riesgo concreto), máxime cuando el título de su artículo parece reconocer la importancia de este ensayo. Lo que precisamente viene a demostrar el NLST (cuyos resultados han sido rápidamente trasladados a guías de práctica clínica de varias sociedades científicas norteamericanas) es que el cribado con LDCT en un determinado grupo de riesgo reduce la mortalidad por cáncer de pulmón, por lo que podría implementarse dentro de un programa estructurado y multidisciplinar que garantice unos resultados comparables4. Los profesionales implicados (y los participantes seleccionados) deben conocer los potenciales beneficios y riesgos de un cribado de estas características, pero será el participante quien en última instancia decida someterse o no al mismo.
La recomendación de los autores de «aunar esfuerzos para que los profesionales sanitarios estén alerta sobre la sintomatología del cáncer pulmonar, aumentando su entrenamiento y concienciando a los fumadores del riesgo que tienen de desarrollar cáncer pulmonar» es insuficiente si se quiere detectar precozmente esta enfermedad y reducir su mortalidad. En algunos países ya hay más exfumadores que fumadores activos que cumplen los criterios de inclusión del NLST, por lo que excluir a la creciente población que ha abandonado el consumo de tabaco pero que tiene un riesgo incrementado de desarrollar cáncer de pulmón no parece una medida muy recomendable.
El debate no solo continúa abierto, sino que debe permanecer abierto y permeable a las evidencias y opiniones científicas que determinarán, finalmente, si la LDCT juega un papel relevante o no en la detección precoz del cáncer de pulmón.
Conflicto de interesesDeclaro no tener conflicto de intereses ni haber recibido fuentes de financiación.