La cirugía es el tratamiento de elección de la estenosis traqueal. En pacientes no aptos para realizar una cirugía, el tratamiento endoscópico es una alternativa válida que produce alivio de la disnea y mejora la calidad de vida.
El manejo endoscópico combinado consiste en una incisión radial de la cicatriz estenótica con láser o instrumentos fríos, la dilatación mecánica y la colocación de un stent, si existe fractura de anillo traqueal, para evitar la recurrencia1.
Shapshay et al.2 fueron los primeros que, en 1987, realizaron la dilatación endoscópica utilizando un láser de CO2 en pacientes con estenosis traqueal. Su uso se ha incrementado durante las pasadas 2 décadas hasta convertirse en una herramienta estándar en la mayoría de los centros.
Los láseres que se utilizan en general para el manejo de la estenosis traqueal son los de CO2 y los Nd:YAG. El láser de CO2 permite un corte preciso con poco daño térmico, pero su principal inconveniente es la dificultad de enviar el haz a través del broncoscopio. El láser de Nd:YAG se utiliza fácilmente con el broncoscopio, pero sus características de difusión pueden causar daño térmico al tejido circundante.
El sistema robótico digital de microcirugía AcuBlade (Digital AcuBlade Robotic Microsurgery Laser System; Lumenis© Cirugía) es una nueva generación de láser de CO2 de uso frecuente en fonomicrocirugía. Las principales ventajas del AcuBlade® en comparación con los láseres tradicionales de CO2 son la posibilidad de ajustar el tipo de incisiones (recta, curva o la ablación en disco; fig. 1), el mínimo daño térmico, y el filtrado computarizado que elimina el temblor del operador sin impedir su capacidad para dirigir el láser en la zona objetivo3,4. Por lo tanto, el AcuBlade® permite realizar una resección tan regular como la llevada a cabo con instrumentos fríos, pero con las ventajas de mantener un campo operatorio sin sangre.
Utilizamos el AcuBlade® por primera vez para el manejo de una estenosis subglótica idiopática en una paciente de 73 años. La estenosis aparecía como una lesión en forma de banda circunferencial reticulada y fibrótica que se encontraba a 8mm de las cuerdas vocales, y presentaba una longitud de 15mm y luz en las vías respiratorias de 6mm.
El AcuBlade® permitió realizar una resección uniforme de la cicatriz estenótica sin lesionar el epitelio traqueal y restaurar así una luz traqueal normal. Por lo tanto, decidimos no realizar ninguna dilatación mecánica para evitar lesiones traqueales, y tampoco colocar un stent, dada la proximidad de las cuerdas vocales. A los 15 meses de seguimiento, la paciente se encuentra asintomática, sus valores de espirometría son normales y presenta permeabilidad de la tráquea.
A la luz de esta experiencia, se utilizó AcuBlade® en otro caso difícil, que era el manejo de unas granulaciones que complicaron la colocación de un stent subglótico5. Las lesiones habían destruido completamente los pliegues vocales y habían causado obstrucción luminal del stent. AcuBlade® fue capaz de crear una escisión hemostática precisa de las granulaciones sin dañar las cuerdas vocales. Permitió asegurar la permeabilidad de la vía aérea, y evitar así otros tratamientos como una aritenoidectomía o una cordectomía, que habrían presentado efectos adversos sobre la función fonatoria.
Por lo tanto, AcuBlade® podría ser una herramienta útil en el arsenal del broncoscopista intervencionista. En comparación con los láseres tradicionales, permitió incisiones hemostáticas y muy uniformes con una dispersión térmica mínima. Además, se pueden realizar incisiones de varios tipos según la forma de la lesión.