Felicitamos al Dr. Ramos et al.1 por la interesante descripción del elastofibroma dorsi (ED). En su estudio estos autores concluyeron que esta entidad es un tumor de la pared torácica que no se diagnostica lo suficiente, cuya influencia es incierta y cuya resección quirúrgica sólo está indicada en pacientes sintomáticos. Nos gustaría aportar y describir nuestra experiencia con un caso similar, incluidos los hallazgos de la resonancia magnética, prestando especial atención a las imágenes ponderadas en difusión.
El elastofibroma es un tumor fibroelástico benigno que casi siempre se localiza en la región subescapular inferior entre la escápula y la pared torácica. Este tipo de tumor se detectó de forma fortuita en hasta el 2% de pacientes de edad avanzada mediante tomografía computarizada (TC)2. El ED es un proceso reconocido en los estudios anatomopatológicos publicados y se le ha prestado atención en estudios radiológicos recientemente publicados porque, con frecuencia, en este tumor se observa la captación de fluorodesoxiglucosa (FDG) mediante tomografía por emisión de positrones (TEP)/TC3-5. Describimos un caso de ED en el que la resonancia magnética (RM) mostró una intensa restricción de la difusión, que no debe interpretarse por error como la restricción anómala que se observa en las lesiones malignas.
La paciente era una mujer de 41 años de edad con diagnóstico de carcinoma tímico, tratado con quimioterapia y radioterapia. La TC torácica mostró una masa mediastínica anterior que no se modificó después del tratamiento. Más tarde la paciente se sometió a una RM torácica que no mostró signos de actividad de la masa mediastínica tanto con realce de contraste como con restricción de difusión. Sin embargo, se observó otra masa en la región subescapular inferior derecha entre la escápula y la pared torácica. La masa se asociaba a una baja intensidad de señal en T1 y T2 y una restricción moderadamente heterogénea e intensa en las secuencias ponderadas en difusión (Fig. 1). La masa era estable, si se la comparaba con los exámenes previos. El examen histopatológico demostró estrías de tejido graso que alternaban con fibras de tejido fibroso. El tejido fibroso hipertrófico contenía material fibrilar con afinidades de tinción idénticas al tejido fibroso necrótico, músculo y grasa. Estos hallazgos eran compatibles con un ED.
A) La secuencia ponderada en difusión (valor b = 600) muestra una masa de intensa restricción en la región subescapular inferior derecha entre la escápula y la pared torácica. B) La masa se caracteriza por una isointensidad de señal moderadamente heterogénea en T2. C) La fusión de la secuencia ponderada en T2 demuestra más claramente la intensa restricción en la masa.
Recientemente, en casos clínicos publicados se ha documentado la detección casual de un ED mediante TEP/TC. En estos casos se observó con frecuencia una captación ligera y moderada de FDG que no debe interpretarse erróneamente como la acumulación anómala de las lesiones malignas3-5. También se utilizó la RM con imágenes ponderadas en difusión para valorar las lesiones malignas pero, hasta la fecha, no se han descrito hallazgos de ED con estas secuencias. La RM con imágenes ponderadas en difusión proporciona información funcional (es decir, la difusividad de las moléculas de agua) y puede destacar lesiones de celularidad elevada por todo el cuerpo. Las secuencias ponderadas en difusión pueden ser un potente adyuvante de la RM anatómica, detectando lesiones sutiles y cambios patológicos en estructuras de tamaño normal, al igual que reduciendo el tiempo de interpretación de las imágenes6. En conclusión, observamos la restricción de difusión en la RM de una paciente con ED, que podría asociarse con el proceso inflamatorio de esta lesión benigna. Este hallazgo no debe diagnosticarse por error como un tumor maligno.