Se presenta el caso de un varón de 15 años de edad con una fístula traqueoesofágica presumiblemente congénita (tipo H) y antecedentes de bronquitis de repetición, bronconeumonía y tos frecuente tras la ingestión de líquidos. A raíz de un episodio de esputos hemoptoicos en la fibrobroncoscopia se halló un orificio traqueal de la pars membranacea que comunicaba con la luz esofágica. Las radiografías simples de tórax y abdomen mostraban aireación esofágica y distensión abdominal, respectivamente. El esofagograma reflejaba el paso de contraste al árbol traqueobronquial sin determinar otras lesiones concurrentes. Fue la resonancia magnética cervical y torácica la que precisó la localización, morfología y relación anatómica con las estructuras vecinas de la fístula traqueoesofágica. El paciente fue intervenido quirúrgicamente, mediante cervicotomía lateral izquierda individualizándose tráquea y esófago, reforzando la pared posterior de la tráquea con un colgajo muscular. Los resultados fueron óptimos.
We report a case of a 15-years-old boy with presumably congenital tracheoesophageal (H type) fístula. He has a history of recurrent bronchitis, bronchopneumonia and cough after liquid swallowing. Soon after an episode of blood stained sputum, a tracheal orifice in the pars membranacea that opened into the esophagus was found by fiberoptic bronchoscopy study. Chest and abdominal X-rays showed esophageal air and abdominal distention, respectively. The esophagram showed the passage of contrast agent to the tracheobronchial tree and no additional concurrent lesions. Cervical and thoracic magnetic resonance images revealed the location, morphology and anatomical relation to the neighbouring structures of the tracheoesophageal fístula, which was repaired surgically by left lateral cervicotomy and direct section and suture. The posterior wall of the trachea was reinforced with a muscle flap, with good results.