A lo largo de 15 meses se estudió, de forma prospectiva, la resistencia primaria de 100 cepas de Mycobacterium tuberculosis aisladas en enfermos diagnosticados de tuberculosis activa mediante confirmación bacteriológica. Se encontraron cepas resistentes, a uno o más fármacos, en el 5% de los pacientes. Tres enfermos presentaron resistencias a dos fármacos (isoniacida y estreptomicina en 2 casos y rifampicina e isoniacida en el otro), uno a tres (isoniacida, estreptomicina y etambutol) y otro únicamente a la pirazinamida. Debido al escaso número de resistencias primarias halladas, no fue posible establecer si alguno de los factores analizados en cada paciente se relacionaba con una mayor tasa de resistencias, si bien 4 de las 5 cepas con resistencia primaria procedían de muestras respiratorias.
Concluimos que la tasa de resistencias primarias en nuestro medio es escasa, lo que nos permite, por una parte, prescindir del uso de un cuarto fármaco durante los dos primeros meses del tratamiento antituberculoso y, por otra, no realizar de forma sistemática pruebas de sensibilidad a pacientes que no refieran historia de tratamiento antituberculoso previo.
The primary resistance of 100 specimens of Mycobacterium tuberculosis isolated in patients with active tuberculosis confirmed bacteriologically was studied prospectively over a period of 15 months. Strains resistant to 1 or more drugs were found in 5 patients. Three patients presented resistance to 2 drugs (isoniacide and streptomycin in 2 and rifampicin and isoniazid, streptomycin and ethambutol); and the fifth was resistant only to pyrazinamide. Owing to the few instances of primary resistance found, it was impossible to establish whether any of the factors analyzed in each patient was related to a higher index of resistance, although 4 of the 5 resistant strains came from respiratory specimens.
We conclude that the index of primary resistance in our area is low and this allows us to do without prescribing a fourth drug in the first two months of anti-tuberculosis therapy, and makes routine sensitivity tests unnecessary for patients with no history of prior treatment for tuberculosis.