Desde que Jacobeus, en 1910, sentó las bases de la endoscopia pleural con fines esencialmente terapéuticos, esta exploración ha experimentado una gran evolución. Lloyd propuso, con fines diagnósticos, la toma de muestras biópsicas pleurales bajo control visual, experimentando esta técnica un notable auge.
El perfeccionamiento del aparataje y su alta rentabilidad han convertido a la toracoscopia en una exploración habitual en el arsenal diagnóstico y terapéutico de la patología torácica.
Las complicaciones referidas son escasas. Hemos revisado la literatura, confrontándola con nuestra propia experiencia. Las reseñadas con más frecuencia han sido los episodios de fiebre transitoria, las cámaras residuales de neumotórax, las fugas aéreas persistentes y el enfisema subcutáneo, sin ningún caso de mortalidad.
Las contraindicaciones a la técnica son mínimas, pudiéndose señalar como tales la existencia de infarto de miocardio en los tres meses previos a la exploración y la presencia de sínfisis pleural extensa.
Since 1910 when Jacobeus established the basis for pleural, endoscopy for essentially therapeutic aims, this exploration has undergone great evolution. For diagnostic purposes, Lloyd proposed the taking of pleural biopsy samples, under visual control with this technique undergoing a significant increase in use.
The perfectioning of the apparatus and its high profitability, have converted thoracoscopy into an habitual exploration in the diagnostic and therapeutic arsenal for thoracic disease. The complications referred are few. The literature was reviewed and compared with the autors own experience. The most frequent complications found were transitory episodes of fever, residual chambers of pneumothorax, persistent air leaks and subcutaneous enphysema with no cases of death.
The contra-indications of this technique are minimun, such as myocardial infarction in three months prior to the explorations and the presence of extensive pleural symphysis.