Entre 1959 y 1967 se diagnosticaron 140 enfermos de sarcoidosis, 22 de ellos desarrollaron sarcoidosis crónica. En 134 (20 de ellos en curso crónico posterior) se conocían los recuentos de granulocitos, monocitos y linfocitos.
Los enfermos con eritema nodoso tenían mayor número de monocitos. Sólo se observó linfopenia por debajo de 1.000 elementos en un 7,5% de enfermos y por debajo de 1.500 especialmente en las formas crónicas.
Una disminución significativa de linfocitos se observa en sujetos mayores de 40 años cuando el diagnóstico, en enfermos con PPD negativo a 10 UT y en los que la enfermedad requirió tratamiento con estero ides.
Se halló correlación entre linfopenia inicial y un pronóstico menos favorable. El 85% de enfermos tenían buen pronóstico.
Los enfermos de sarcoidosis con linfopenia inicial deben controlarse especialmente. La presencia de eritema nodoso no siempre garantiza un buen pronóstico de la enfermedad.