Fisiopatología de las estenosis orgánicas y
funcionales de tráquea y grandes bronquios
·Doctor Juan A. Estada
Aproximadamente la mitad de la tráquea.
así como los grandes bronquios, se encuentran
en el tórax, sometidos, por tanto, a las
·variaciones de presión que en él se producen,
creándose un gradiente llamado presión
transmural en la cual interviene en
algunas zonas un efecto Venturi. Estas variaciones
de. presión influyen, dadas las
condiciones anatómicas de todas conocidas,
sobre su calibre; según los estudios
roentgenológicos de Brücker (1950). en 23
hombres de diecinueve a veinticinco años ·
ventilando profundamente, las medidas en
milimetros eran:
Tráquea ..................... .
Bronquio derecho .... .
Bronquio izquierdo .. .
lnsp. Esp.
18,2
17,0
13.0
16,9
14,2
11 ,0
Esto se refiere, naturalmente, a la tráquea
intratorácica, ya que en el cuello la tráquea
dfsminuye de calibre en la inspiración por
disminuir la presión en su interior.
Por efecto de la musculatura traqueal
puede reducirse su luz en un 25 por 100,
• Jefe del Servicio de Funciones Respiratorias de la
Clínica " Puerta de Hierro".
lo que tiene importancia en la reducción
del espacio muerto durante la ventilación
superficial.
En la tos. la sobrepresión existente se
iguala rápidamente con el exterior a nivel
de tráquea y grandes bronquios, mientras
que las porciones pulmonares tienen que
vaciarse a través de los más finos bronquios,
necesitando tiempo para ello, durante
el cual la presión existente se transmite
a la tráquea. dando lugar, en los casos
normales, a una incidencia de la parte
membranácea en la luz traqueal, de forma
que ésta pueda quedar reducida a la décima
parte y su diámetro transversal a un
tercio. Esto se intensifica cuando existen
mecanismos estenosantes de los pequeños
bronquios.
Una obstrucción fija, sea intrínseca o extrínseca,
se reconoce por el aumento homogéneo
de las resistencias de vías aéreas
detectables por pletismografía corporal.
Más frecuente es que la resistencia, por los
mecanismos antes indicados, sea más acusada
en la fase espiratoria, pudiendo ser
esto a veces sólo detectable con el registro
del diafragma flujo/volumen durante la espiración
forzada, como en. un caso de bo.cio
intratorácico que se presenta, comparándose
la gráfica con la obtenida en un caso de
bocio extratorácico.
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El registro del diagrama flujo/volumen
nos permite diagnosticar el síndrome de
Herzog, en el cual, durante la tos o bien por
una espiración forzada, se aplasta totalmente
la tráquea, dando lugar a la característica
sintomatología. El diagnóstico es
factible por el acelerograma y el diag rama
flujo, volumen, siendo el trazado muy diferente
del aplanado flujo crítico de los colapsos
bronauiolares.
En esta rápida visión de los puntos fisiopatológicos
más destacados de la obstrucción
de la tráquea y grandes bronquios
quiero presentar lo que ocurre cuando en
uno de los bronquios existe una disminución
de calibre; al crearse una "compliance
dinámica", dependiente, por tanto, de la frecuencia
ventilatoria, diferente en cada lado,
se produce aire péndulo, que a la vez que
aumenta el trabajo ventilatorio es un factor
importante en la aparición de una hipoxemia.
Se presenta un claro caso de obstru cción
bronquial tumoral, con aire péndulo, el cual
desaparece al ser irradiado.
Por último, quiero solamente indicar que
si un proceso conduce a una fijación de
tráquea y grandes bronquios, puede dificultar
la ventila ción. Bien conocido es que el
descenso inspiratorio del íleo es de gran
importancia para la ventilación de los vértices
pulmonares.
Repercusión sobre el mediastino
de los traumatismos torácicos
Doctor F. París Roméu
La -progresiva aceleración y mecanización
de la vida moderna trae consigo un aumento
de accidentes, especialmente de
tráfico y de trabajo, con sus correspondientes
procesos traumáticos.
El mediastino, como región anatómica del
tórax portadora de vísceras vitales y como
órgano central situado entre dos espacios
pleurales simétricos, sometido a. una misma
presión negativa, participa en la patología
traumática del tórax cuando la fuerza
viva rompe el normal equilibrio.
El autor, después de esbozar la estadistica
de su Servicio (figuras 1 y 2) sobre los
distintos procesos traumáticos del tórax,
centra su exposición en la repercusión que
el traumatismo tiene sobre el mediastino.
1. Penduleo y bamboleo mediastlnico,
como consecuencia de la respiración paradójica.
En el traumatismo cerrado, cuando
se producen fracturas costales a nivel de
diversos arcos, se puede provocar una respiración
paradójica de grave repercusión
fisiopatológica. Es el clásico "volet" de los
270
franceses o "flail chest" de los anglosajones,
que lo podemos definir er:i lengua hispánica
como el póstigo torácico, el tórax
fláccido traumático o el tórax volante batiente.
Según la gravedad de esta alteración, se
puede producir desde un simple balanceo
pendular periódico, regido por el ciclo respiratorio,
hasta un grave aleteo mediastínico.
En la inspiración, la parte de la pared
torácica desconectada de la caja viene a
hundirse, con lo que se anula la presión
negativa intrapleural del lado afecto y el
mediastino es desplazado hacia el otro lado.
Lo contrario ocurre en la espiración (figuras
3 y 4). Esto trae como consecuencia
la producción de un aire péndulo que, aunque
sea discutido por Carey y colaborado-
. res, tenemos que admitirlo, al mismo tiempo
se produce una dificultad hemodinámica
de entrada y salida de sangre al sistema cardiopulmonar.
Este trastorno es importante en los grandes
descalabros de la pared torácica cuan