El objetivo de este estudio ha sido analizar la posibilidad de un patrón característico que distinga entre formas agudas (sintomatología inicial igual o inferior a una semana) y subagudas o crónicas (superior a una semana) de tuberculosis pleural (TP) en nuestro medio. Hemos llevado a cabo un análisis retrospectivo de 102 TP diagnosticadas entre 1986 y 1992, comparando los hallazgos de la historia clínica, radiología, bioquímica y citología pleural, microbiología del esputo, líquido y biopsia pleural, estudio anatomopatológico de las biopsias, evolución, respuesta al tratamiento y secuelas al año y medio de control. Del total de casos, 32 eran de TP aguda (31,4%) y 70 no aguda (68,6%). Los datos analizados fueron similares en ambos grupos a excepción de valores más elevados de LDH y del porcentaje de polimorfonuclea- res pleurales en las TP agudas, mientras en las no agudas se observó una mayor asociación de un síndrome constitucional y un predominio linfocitario. En la TP no se confirma un patrón clínico o radiológico específico ni diferencias evolutivas y de respuesta al tratamiento que distingan entre formas agudas o no a partir de los 7 días. La LDH y la citología fueron los únicos parámetros que diferenciaron las formas más agudas y, en ocasiones, inicialmente se mostraron indistinguibles de un derrame paraneumónico.
To analyze whether a characteristic pattern distinguishes acute forms (symptoms starting no more than one week earlier) and subacute or chronic forms (symptoms lasting more than one week) of pleural tuberculosis (PT) in our practice.
Retrospective analysis of 102 cases of PT diagnosed between 1986 and 1992, comparing the findings of case histories, imaging, pleural biochemistry and cytology, microbiologo of sputum, pleural biopsy and fluid, anatomy and pathology studies of the biopsy specimens, course of disease, response to treatment and sequelae after one year and a half.
Thirthy-two patients (31.4%) had acute PT and 70 (68.6%) had chronic forms. LDH levels and the percentage of pleural nuclear polymorphism were higher in acute cases, while the concurrence of systemic involvement and lym- phocytic predominance was more often seen in chronic cases. Other data analyzed were similar in both groups.
No speciflc clinical or X-ray profiles or differences in course of disease and response to treatment distinguishes between acute and chronic forms of PT after 7 days. Only LDH levels and cytology results differentiated acute forms and, occasionally, such cases were indistinguishable from pneumonia-like effusion.