El 14 de octubre del 2010 se celebró el primer “Día mundial de la espirometría”, evento que fue promovido a nivel mundial por la European Respiratory Society (ERS) a través de su organismo de difusión la European Lung Foundation (ELF).
El objetivo de esta jornada fue el de dar a conocer entre el público general, los profesionales y las autoridades, la prueba diagnóstica más usada entre los neumólogos, “la espirometría”. También, el de aumentar la conciencia sobre la importancia de las enfermedades pulmonares y las medidas preventivas para evitar su aparición y/o evolución.
Dentro de las sociedades neumológicas, la SEPAR-ALAT promovió la realización de espirometrías en los centros hospitalarios entre el público asistente.
Desde el Hospital de la Santa Creu i Sant Pau de Barcelona, queremos dar a conocer la experiencia que supuso dicho evento en nuestro centro. El día mencionado, de 9 a 14 horas, se realizaron espirometrías al público en general, según los procedimientos de la SEPAR1. Se contó con 10 enfermeras/os técnicas/os en función pulmonar (dos por hora), un médico adjunto y un médico residente del servicio de Neumología. Se dispuso del siguiente material: dos espirómetros (Datospir 600, Sibelmed, Barcelona, España), tallímetro, báscula, boquillas desechables, pañuelos y antisépticos de manos, así mismo se distribuyó material informativo sobre la espirometría2 y los efectos nocivos del tabaco3 traducidos al español. Previa a la realización de la prueba se administró un cuestionario4 de 12 preguntas, propuesto por la ERS y la ELF y traducido al español, para obtener mayor información de las personas interesadas en realizar la prueba. Los médicos responsables informaron de las espirometrías y aquellas que resultaron alteradas fueron remitidas al médico de Atención Primaria con una carta en la que se informaba del grado de alteración. A todas las personas fumadoras se les dio consejo mínimo antitabaco, así como el material informativo del que se disponía3.
Se informó a los medios de comunicación del evento con la finalidad de que ayudaran a difundir el conocimiento de la espirometría entre la población general, así como de la importancia de la detección temprana y la prevención de algunas de las enfermedades pulmonares más prevalentes.
Se realizaron 75 espirometrías. La media (desviación estándar) de edad de los participantes fue de 56,3 (17,8) años y la del volumen espirado en el primer segundo (FEV1) fue de 2,58 (0,92) L [88,3 (20,8)%], con un ligero predominio de mujeres 39 (52%). El porcentaje de fumadores o exfumadores fue del 49%. Se objetivó patología obstructiva (por tener la relación FEV1/capacidad vital forzada inferior al 70%) en 20 de los sujetos participantes (27%), 6 de los cuales (30%) nunca se habían realizado una espirometría con anterioridad. De los 32 individuos fumadores activos 8 (25%) presentaron obstrucción al flujo aéreo. De todos los participantes, 29 (39%) manifestaron que se habían realizado la prueba con anterioridad y tan sólo 33 (44%) manifestaban conocer la prueba.
Este evento tuvo una muy buena participación y aceptación por parte de la población y permitió detectar algunos casos de alteraciones espirométricas desconocidos previamente.
El grado de conocimiento de esta prueba es todavía muy bajo entre la población general. Sería recomendable, pues, que se realizaran ediciones futuras de esta jornada para conseguir un mayor conocimiento y divulgación de la prueba, así como la posible detección de individuos con enfermedades respiratorias de forma precoz y poder, de esta manera, actuar con mayor contundencia sobre los factores de riesgo desencadenantes.